Desde Podemos condenamos rotundamente el último ataque del Estado de Israel a la sociedad civil palestina, ocurrido esta madrugada del 18 de agosto en Ramallah y Al-Bireh, Cisjordania. Anoche, varios convoyes militares israelíes arrasaron las sedes de varias organizaciones palestinas de derechos humanos, destruyendo e incautando material, equipos y documentos; y decretando el cierre unilateral de las mismas “en nombre de la seguridad de la región”.
Seis de esas organizaciones ya habían sido acusadas -e ilegalizadas- por parte de Israel en octubre de 2021, alegando supuestos vínculos con el Frente Popular de Liberación de Palestina (FPLP). Ante ello, la comunidad internacional -incluyendo la ONU y la UE, que destinan fondos de cooperación a varias de estas organizaciones- realizaron una investigación por la cual concluyeron que no había evidencias reales que justificaran que las organizaciones fueran calificadas como terroristas. En consecuencia, se llamó a seguir colaborando con ellas con la provisión de fondos de cooperación.
Estas organizaciones, entre las que se encuentra Al-haq o Health Work Committees, son prestigiosas organizaciones sociales dedicadas a la promoción y defensa de los derechos humanos en Palestina y los territorios ocupados, proveyendo alimentos y acceso a una vivienda, servicios de salud y otras necesidades básicas a buena parte de la población palestina. Asimismo, son organizaciones que trabajan activamente para que Israel sea juzgado por sus crímenes ante la Corte Penal Internacional.
Estos hechos se producen en un clima de tensión particularmente elevada en el territorio, tras la ofensiva militar israelí sobre Gaza este mismo mes de agosto y la intensificación de la violencia, los hostigamientos y las detenciones ilegales por parte de las autoridades israelíes contra la población palestina en los últimos tiempos.
Sin duda, se trata de un gravísimo ataque a la sociedad civil organizada palestina que lucha por denunciar los crímenes y abusos sistemáticos perpetrados por el Estado de Israel, y por reivindicar que lo que existe en Palestina es un régimen de ocupación y apartheid que afecta -e impide- la vida cotidiana de todos y cada uno de los y las palestinas de manera sistemática. Y se produce, además, en un contexto de total y devastadora impunidad de Israel para llevar a cabo violaciones de derechos humanos y posibles crímenes internacionales.
Por todo ello, desde Podemos una vez más elevar la voz de alarma, denunciar estos hechos que apenas han tenido cobertura mediática, condenarlos rotundamente y apelar a la responsabilidad de la comunidad internacional, y particularmente la Unión Europea, de llevar a cabo acciones concretas para asegurar la rendición de cuentas y el cumplimiento del derecho internacional por parte de Israel, así como la protección integral de la población palestina que vive bajo el régimen de ocupación y apartheid israelí.
Jueves, 18 de agosto de 2022