Proyecto: 419

Grandes ideas para pequeñas empresas

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Pequeños empresarios se dejan la vida en levantar cada mañana su negocio. Sabemos que quieren mimar sus pequeñas empresas, pero también que muchas veces no tienen los medios y conocimientos para sacarle el mayor partido a sus negocios. La ayuda de Impulsa nos permitiría democratizar el diseño. Acercar los conocimientos y los medios a todas las empresas. Queremos que consigan sacar lo mejor de sí mismos y para esto aplicar el diseño de forma integral. Desde diseño web hasta interiores, a un precio accesible, y según las necesidades de cada empresa.

Contexto territorial

La idea se desarrollaría en Valencia Ciudad, con una población de 800.000 habitantes. Nuestro público objetivo son negocios del municipio de Valencia, principalmente de barrios periféricos (benimaclet, campanar, tres forques...) Mientras que los negocios situados en el centro de la capital suelen tener recursos suficientes para ofrecer una imagen cuidada y profesional, los de la periferia no. En la mayoría de los casos no existe ningún criterio de sobre diseño, márketing, o ninguna otra herramienta que les pueda ayudar a tener una imagen profesional ni tampoco recursos suficientes como para poder encargarle a nadie estas tareas.

Temáticas

• Arte y cultura
• I+D+I y Nuevas Tecnologías
• Economía social

Descripción del proyecto

Iba un día por Valencia cuando vi el más horroroso de los carteles en un establecimiento. No sé qué me contuvo para no entrar y decirle al dueño: "Perdone, pero creo que ese cartel no le viene nada bien a su empresa". Bueno, sí lo sé, me habría mandado a la mierda de haberlo hecho. Pensé entonces cómo se podrían comunicar este tipo de ideas al responsable de un negocio. "¡Con una nota anónima!", pensé. Y aquí surgió la idea. Estudiaremos distintos establecimientos de Valencia con serias necesidades de diseño. Diseño integral: desde web hasta imagen corporativa, interiores y merchandising (a veces incluso de ortografía). Pensaremos qué cambios haríamos en estos establecimientos y, como súper heroes anónimos, les dejaremos nuestras propuestas de diseño y un código secreto. Con este código único para cada establecimiento podrán ver en la web algunas de las propuestas que tendríamos para ellos y presupuesto (presupuesto ajustado a nuestro público objetivo). A partir de recibir respuestas de los clientes ya podríamos desvelar nuestra identidad y empezar a trabajar en los proyectos. Con la aparición de los FabLabs (laboratorios de fabricación digital), la producción se va a poder abaratar hasta niveles nunca vistos. Rótulos, displays, posavasos, perchas, y todo tipo de merchandising puede producirse pagando solo la materia prima y el acceso al espacio y sin necesidad de invertir en grandes tiradas. Puedes producir una sola unidad por producto y en una gran variedad de materiales. Queremos aprovechar esto y nuestros conocimientos en diseño para ofrecer a los comercios de a pie que realmente lo necesiten la posibilidad de empoderarse, de ser más competitivos, de sentirse más orgullosos de sus negocios, de que vendan más y mejor. No queremos que sean los más chics del barrio, queremos que tengan una imagen digna, que utilicen bien sus recursos, que estén más cerca de los que sí pueden pagarse a diseñadores y expertos en márketing.

Objetivos del proyecto

1. Potenciar la imagen de negocios de barrios periféricos, subvencionando proyectos de diseño para ellos. 2. Poner en valor el diseño. Más allá de ser una herramienta "chic" el pensamiento de diseño sirve para encontrar la mejor solución con los recursos disponibles. Existe un propósito y, para alcanzarlo, el diseño articula de la forma más eficiente todos los recursos. 3. Debe trabajarse desde el anonimato para viralizar el proyecto y darle así mayor difusión a todas las partes implicadas (negocios, diseñadores, patrocinadores). 4. Dar a conocer la iniciativa internacional FabLab, estandarte de la tercera revolución industrial en la que nos encontramos, ya que permite el acceso a medios de producción a cualquiera, sin necesidad de amplia formación o grandes inversiones económicas. 5. Dar la posibilidad a diseñadores noveles de trabajar en proyectos reales.

Metodología del proyecto y fomento de la participación

Presentamos este proyecto porque con esos 1000 euros (y algo más que podamos reunir con patrocinio de los proveedores de materia prima) queremos subvencionar a tantas empresas como sea posible. Estos trabajos no los haríamos gratis. Otro de los objetivos es poner en valor el diseño, de manera que los diseñadores implicados deberían recibir algo por su trabajo. Lo que sí queremos es que estas empresas, que jamás se habrían planteado contratar a un diseñador, sean capaces de tener estos servicios por un precio más bien simbólico. También pensamos en la posibilidad de trabajar con asociaciones de comerciantes de los barrios, que nos puedan dar claves sobre este tipo de negocios en las que nosotros no hayamos pensado. Paralelamente a nuestra acción callejera de decir a los negocios las cosas negativas que deberían cambiar, haríamos una acción callejera positiva, diciendo a algunos negocios las cosas tan geniales que tienen. Con esto daríamos más visibilidad al proyecto. También contamos con muchos contactos en medios de comunicación, así como nuestra asociación DROP360 (estatutos: https://drive.google.com/file/d/0B5k5mSbjrgmdR1RhNkpXS0xhc3c/view?usp=sharing) Y, como hemos comentado anteriormente, al trabajar desde el anonimato y con acciones callejeras podemos darle visibilidad a todas las partes implicadas.

Segmento poblacional objetivo del proyecto

Nuestros clientes objetivos son pequeñas empresas de la ciudad de Valencia. Negocios familiares y pymes que, objetivamente, tengan carencias de diseño y comunicación en su empresa. Queremos hacer esto porque queremos acercar el diseño a todos y dejar a un lado la idea de que el diseño es algo solo para las clases acomodadas. Cuidar la imagen es importante para todos los negocios. Y en muchos casos, más allá de la imagen el diseño consiste en utilizar de la forma más inteligente posible todos los recursos. Queremos aplicar el diseño de forma transversal: Desde diseño de servicio hasta diseño web, todas las empresas necesitan plantearse qué hacen, cómo lo hacen y para quién lo hacen y queremos poner a disposición de estos pequeños empresarios todos nuestros conocimientos. Para comunicarnos empezaríamos por la acción callejera que ya hemos comentado. Con la ayuda de la web explicaríamos qué hacemos, cómo contactarnos y quiénes nos apoyan en este proyecto.

Cronograma y fases del proyecto

Tiempo total: 6/8 meses 1º. Final 2015/ Principios de 2016: Preparar la imagen del "estudio de diseño efímero". Pensamos en una web con una retrato ilustrado de los diseñadores. estas ilustraciones jugarían con la idea de súperheroes o algún otro concepto. Nuestros nombres no aparecerían hasta que acabe el proyecto. La web sería muy sencilla y contaría con apartados tipo: "Nuestros superpoderes", "Hazañas", "Benefactores", y un apartado personal para cada empresa en la que hayamos pensado donde accederían con contraseña y podrían ver nuestras propuestas. 2º. Durante un mes recorreríamos Valencia estudiando pequeños negocios y qué necesidades pueden tener. Elaboraríamos las propuestas y empezaría la campaña de anónimos. 3º. Los últimos 5-6 meses se dedicarían a trabajar con estas empresas e ir subiendo los cambios a la web y redes sociales. Para seguir dando viralidad al proyecto seguiríamos con la campaña positiva. 4º. Video + Comunicación del proyecto, idea, los propósitos con los que se hizo, etc.

Presupuesto solicitado

- Web: 30/40€. (Hosting + Dominio) - Material para los anónimos (papel, sobres, sello): 50€ - El resto del dinero sería para subvencionar en un 50% - 70% a los negocios locales. Desde materiales (los utilizados en el FabLab), hasta un precio simbólico por nuestras horas de trabajo. (No dispongo de paquete office, así que no he podido utilizar, ni ver, la plantilla.) Presupuesto detallado